El Dilema de China: Crecer o Evitar un «Crash»

“Ain’t no payback time, It isn’t called getting even, here comes the reckoning day”. Megadeth

 

Es curioso con qué facilidad leemos que los mismos gobiernos que han sido incapaces de identificar las burbujas creadas por sus políticas expansivas van a ser capaces de controlar el pinchazo.

En el caso de China, la fe en el gobierno puede estar justificada por una percepción generosa de sus reservas de moneda extranjera y posibilidades de seguir devaluando y bajando tipos. Sin embargo, no debemos olvidar que el gigante asiático consume casi $70.000 millones mensuales desde hace tiempo, y sus reservas se han reducido en $299.000 millones en los últimos cuatro trimestres.

El problema de la deuda china es bien conocido, ya supera dos veces el PIB. A la hora de analizar el riesgo, es cierto que más del 90% se encuentra financiado por entidades financieras locales, y por ello puede ser “gestionable”. El argumento de diferenciar deuda pública y privada en China es incorrecto, sin embargo. Como cualquier analista sabe, y reconoce Moody´s, la deuda de empresas estatales y entidades financieras públicas es un riesgo que hace que la distinción privada-pública lleve a error –no muy distinto a lo que nos pasaba en España con las cajas y empresas públicas -. La deuda total China. La deuda de los gobiernos locales se ha multiplicado por 36 en 15 años, y todos los segmentos han acelerado de manera agresiva su endeudamiento desde 2008.

Una expansión monetaria que hace a la Fed parecer el Bundesbank

En artículos recientes se culpa de la volatilidad en mercados emergentes al efecto negativo de la posible subida de tipos de la Reserva Federal, y como hemos comentado en varias ocasiones, tanto la parada en seco de mercados emergentes como las distorsiones creadas por el exceso de liquidez y la toma de riesgo planificada centralmente son claros daños colaterales de la política expansiva desproporcionada de los últimos años.

Sin embargo, olvidamos que China ha sido garante de su propia burbuja, con una expansión monetaria sin precedentes, comparada con los mercados emergentes o EEUU.

Entre 2009 y 2012 la media de crecimiento anual de la masa monetaria superaba el 18%, muy por encima del crecimiento del PIB nominal y, aunque se ha moderado ese crecimiento desde 2013, sigue siendo superior al 11% anual. ¿Qué quiere decir esto? China ha estado “imprimiendo” más dinero relativo a su PIB que EEUU en medio de su plan de estímulo. China ha alentado su propio fuego con más gasolina.

 

 

Al infinito y más allá… El balance del Banco Popular de China convertido en dólares ($5,5 billones europeos, trillones de EEUU) supera en varios billones a los de por sí enormes del Banco Central Europeo ($2,8), la Reserva Federal ($4,4) o el Banco de Japón ($2,9).

Todo esto nos lleva a analizar qué es lo que puede hacer China para controlar los efectos negativos de la explosión de las burbujas acumuladas –infraestructuras, residencial, deuda en sectores ineficientes, sobrecapacidad sostenida con endeudamiento-.

Por supuesto, desde la planificación central se puede contener el riesgo con una política de control de las entidades de crédito, revisión en detalle de los préstamos de difícil cobro y un paquete de medidas muy agresivas que monitorice la limpieza del sistema financiero “en la sombra” y público, penalice a las empresas privadas o estatales que se endeudan sin control –las políticas anti-corrupción son parte de este intento- y analice el riesgo de la creciente deuda de particulares para operar en bolsa garantizada por inmobiliario (una bomba de relojería que, desafortunadamente, aprobó el gobierno).

Pero todas estas medidas, las veamos como las veamos, significan una cosa:menor crecimiento.

Olvidamos que China ha sido garante de su propia burbuja, con una expansión monetaria sin precedentes, comparada con EEUU

China necesita hoy cuatro veces más deuda que hace una década para generar una unidad de PIB, según Morgan Stanley.

Por ello el gobierno chino tiene ante sí una responsabilidad y un riesgo. Mitigar los efectos colaterales de la explosión de la burbuja de deuda ineficiente y saber que no puede crecer al 7% mientras lo hace. No se puede sorber y soplar a la vez cuando se ha creado una sobrecapacidad industrial a través de planes de estímulo superior al 30%. En Europa lo sabemos bien.

Como la opción de dejar quebrar y cerrar a las empresas zombi que abundan en China es imposible por el riesgo de crear un alto desempleo (lean el aterrador artículo del NY Times), la solución es buscar un “aterrizaje lento”… Y eso implica muchos años de crecimiento muy inferior a lo que estamos acostumbrados. El hecho de que los políticos chinos tengan muy claro que se debe atacar el problema de saturación de deuda en sectores rentistas y subvencionados es muy relevante. Darse cuenta de que no se va a poder crecer a tasas del pasado, de “ciudad fantasma” y empresa zombi, es esencial.

China va a salir reforzada de esta situación si toma las medidas drásticas y hace las reformas estructurales necesarias. Reformas que incluyen la adopción de políticas de buen gobierno, transparencia y responsabilidad crediticia. Pero eso significa crecer al 3,5-4% máximo, no al 7%. Porque no lo va a hacer manteniendo crecimientos inviables y valoraciones de burbuja. De la misma manera que Europa no lo pudo hacer ni lo puede hacer Brasil, China se enfrenta al reto de atajar el riesgo de saturación de deuda antes de que se vuelva sistémico. Y solo lo va a conseguir modificando rápidamente su patrón de crecimiento. Es por ello que el dilema al que se enfrenta es si va a crecer de cara a la galería o solventar la burbuja de deuda mientras es gestionable. No va a poder hacer las dos cosas a la vez. Y tampoco va a ser fácil.

Entrevista en El Cascabel Sept 2015

Comentarios sobre:

– Posible ralentización y riesgos políticos: http://www.bolsamania.com/noticias/pulsos/daniel-lacalle-ante-un-cambio-de-gobierno-hay-riesgo-de-volver-a-incurrir-en-el-error-de-pensar-que-todo-es-fiesta-porque-que-bce-apoya–769233.html

http://blogs.elconfidencial.com/mercados/lleno-de-energia/2015-07-24/baja-el-paro-las-reformas-funcionan_940565/

– Cataluña: http://blogs.elconfidencial.com/economia/lleno-de-energia/2012-11-03/independencia-desastre-para-cataluna-y-espana_437492/

– China: https://www.dlacalle.com/el-pinchazo-de-la-burbuja-china-afectara-a-todos/

-Piketty: https://www.dlacalle.com/piketty-se-equivoca/

Brasil en Recesión. ¿Riesgo para España?

“I’ve found the way through the confusion, that’s why I’ve lived my life safe inside the security of illusion”. Saga
El viernes se confirmó lo que temíamos en esta columna desde hace tiempo.Brasil entraba en recesión técnica con el PIB cayendo un 1,9% en el segundo trimestre, pero además revisando a la baja el dato del primer trimestre, con una caída del 0,7% en vez del 0,2% inicialmente publicado. Las cifras son muy importantes, con una caída del consumo del 2,1% y de la actividad constructora del 8%. Una caída del 2,9% del PIB en los primeros seis meses que no se explica exclusivamente por el precio del petróleo ya que la contribución al PIB del sector petrolero es del 13% y la renta petrolera total (ingresos quitando costes) no ha sido superior al 2,5% en los últimos años.

De hecho, el crecimiento anual del PIB de Brasil lleva cayendo desde la media de +4,5% en el periodo 2006-10 a un +2,1% entre 2011 y 2014, mucho antes de la debacle del petróleo.

Una recesión brasileña no debe tomarse a la ligera. La economía brasileña representa cerca del 40% del PIB de Latinoamérica y un 2% del mundial.

En junio comentábamos en Brasil y la política de más es menos que el país latinoamericano se había lanzado a unas políticas de demanda -planes de estímulo- que iban a llevarle a un callejón de difícil salida. La caída de las materias primas y la decisión equivocada de financiar inversiones ruinosasa muy largo plazo con ingresos en dólares a muy corto han llevado a desequilibrios muy similares a los que sufrió la economía española con la burbuja inmobiliaria.

Debemos distinguir entre inversiones dolarizadas y no-cíclicas (en renovables, con contratos a largo plazo y moneda local) con las inversiones pro-cíclicas

El error histórico de los populismos de usar las épocas de bonanza para acentuar los desequilibrios y gastar como locos lo ha repetido, paso a paso, el ejecutivo de Dilma Rousseff.

El impacto para España es menor en cuanto a contribución del sector exterior de lo que pensamos. Ya en 2014 las exportaciones a Brasil cayeron un 13% y nuestro país importa más de lo que le vendemos. Como en el caso de China, la balanza comercial es negativa para España, por lo que una devaluación de la moneda local y la ralentización no tienen un gran impacto sobre la contribución al PIB del sector exterior.

Donde sí tiene un importante impacto es en la inversión que España ha realizado en Brasil.

Debemos distinguir entre inversiones dolarizadas y no-cíclicas –en renovables, con contratos a largo plazo y costes en moneda local- con las inversiones pro-cíclicas.

Las inversiones españolas en Brasil alcanzaron un máximo en 2013 con 2.538 millones de dólares, y la Cámara de Comercio estima que las inversiones totales llevadas a cabo entre 2014 y 2016 alcanzarán los 17.600 millones de dólares. De ese total de inversiones, según mi análisis, se puede dividir un 30% en inversiones pro-cíclicas, que pueden sufrir de manera agresiva ante la recesión, y un 70% no-cíclicas, ya porque sean en concesiones  o proyectos dolarizados o regulados.

Una recesión brasileña no debe tomarse a la ligera. La economía brasileña representa cerca del 40% del PIB de Latinoamérica y un 2% del mundial

Por lo tanto, el impacto máximo de la crisis brasileña podría venir de provisiones en el sector privado y menores ingresos desde el país latinoamericano. A menos que se convirtiera en una crisis financiera con su correspondiente efecto dominó –y aun es mucho más que prematuro estimar ese escenario-, el impacto no sería un factor determinante para hundir la recuperación.

Otro factor de riesgo es una deuda pública mucho mayor a lo que muestra la cifra oficial. El 59% sobre PIB parece ópticamente “bajo”, pero Moody´s alerta de que es superior al 100% del PIB (For Latin American Sovereigns, Hidden Liabilities Add to Credit Risk) ya que hay que incluir planes de pensiones públicos y las garantías a empresas públicas y bancos estatales.

¿Por qué no es probable un efecto contagio similar a la crisis de principios de la década de 2000? Porque las reservas de divisas, como ya hemos comentado en varios artículos sobre la “parada en seco” de los países emergentes, superan los $370.800 millones. No solo son muy superiores  a las registradas en aquella crisis sino que se han creado medidas para colaborar entre los BRICs (Brasil, Rusia, India y China) para mitigar estos desequilibrios.

En cualquier caso, debemos estar alerta. La crisis china, la parada en seco de los mercados emergentes, el estancamiento japonés y francés… Son muchos factores que debemos vigilar, y a los que España no es inmune. Pero, de momento, el impacto es muy bajo.